Mi maestro,
vagabundo del Dharma,
inmóvil danza su danza de vida
en cada gesto cotidiano.
Sus pies, ¿qué pies?,
¿qué maestro?,
calzados con sus leves sandalias
danzan en los fenómenos,
incesante danza, vacía danza
¿Quién podrá atraparlo,
si inmóvil su danza ,
no ocupa lugar
ni tiene tiempo?
7-2-2011
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